Tomando cartas en el asunto



Hoy voy a sacar a la palestra posibles problemas que nos podemos encontrar con niños de alta capacidad en el colegio. A menudo están muy aburridos y se sienten diferentes a sus compañeros, pero ellos quieren encajar. Por lo que es habitual que desempeñen un papel que piensan que les ayudará. Pueden hacerse los payasos de la clase, ser gamberretes, retar a los profes, llamar la atención o por el contrario no querer destacar de ninguna forma. Para ello, si es necesario, dejan preguntas en blanco en los exámenes, responden mal a posta...

En cuanto a lo social, es común que les cueste relacionarse con los compañeros de su edad puesto que no comparten los mismos intereses. Pero como encuentren alguien con el que encajan, se aferran a esta persona y pueden ser muy absorbentes. Son típicamente de un solo "mejor amigo" y esto les puede llevar a sufrir muchas decepciones con los cambios en el concepto de amistad que experimentan los niños en etapa escolar.

Lo primero que hicimos una vez detectadas las altas capacidades en casa fue informarnos. De repente te salen amigos que son superdotados, o sus hijos, o que conocen a este u otro especialista. Con toda esa información recopilada comprendimos que el cableado del cerebro de estos niños es distinto. La tolerancia a la frustración también es diferente. Es difícil de manejar en muchas ocasiones.

Es muy importante que aprendamos a comprenderles y a desarrollar estrategias para poder dialogar con ellos y darles las explicaciones que requieran. Es una educación muy cansada porque hay que explicarles TODO. A veces les complace la explicación y otras veces no. Tienen que aprender que “hay unas leyes…” normas, etc. Son niños que se lo plantean todo. Los padres y sus educadores nos lo tenemos que tomar como un reto. Tienen un don y tenemos que ayudarles a explotarlo y sacarle partido. Si no lo hacemos, ese don se pierde y ellos sufren porque no puede utilizarlo. 

Es muy importante que interioricemos que ellos viven la vida con otros parámetros, que su razonamiento es distinto. Necesitan encontrar sus razones, que pueden no ser las que a nosotros nos parezcan las más lógicas. Para ello, al conversar les tenemos que hacer muchas preguntas y así entenderemos cómo piensan y cómo sienten: respecto a esto, ¿tú cómo te sientes?” Son niños que no se conforman fácilmente, hay que entender que según ellos, a menudo las cosas deberían de ser de otra manera. Necesitan mucha conversación y tenemos que escucharles.

También es muy importante que se conozcan a sí mismos, que sepan cómo son y que son diferentes a los demás niños de su clase. Hay que trabajar la negatividad con la que suelen enfrentarse a las cosas. Como no encajan en el patrón de su razonamiento, no les suelen gustar y podemos estar ante niños muy tristones y negativos.

Otro de los problemas más comunes en el colegio es la creencia de que no es bueno significarles entre sus compañeros. Que tienen que hacer lo mismo que todos y una vez hayan terminado pueden ampliar si quieren. Es muy habitual pero creo que no es acertado. Si un chaval es diferente, lo ideal es que cuanto antes él y sus compañeros, todo su entorno, lo sepan y puedan actuar con normalidad al respecto. Por ejemplo, un niño que lleva gafas, todo el mundo lo sabe y no se le va a poner a jugar al fútbol como a los demás sin tener en cuenta que lleva gafas. O para ir a clase de natación se le pondrán las lentillas o unas gafas acuáticas graduadas. Todo el mundo acepta que se le trate diferente porque es distinto, porque se ve. En el caso de las altas capacidadees el resto no lo ve, es algo que va por dentro y ellos pueden estar sufriendo mientras que el resto nos empeñamos en que “lo importante es que no destaque entre los demás”…

El problema más típico es enfrentarse a lo académico estrictamente. Como nunca han necesitado estudiar y piensan total, me acuerdo de todo, es súper fácil!”, pues no le dedican el tiempo adecuado y a veces se despistan, no se traen los libros siquiera... También puede ocurrir que, acostumbrados a los buenos resultados, cuando no llegan, lo oculten y solo comenten las buenas notas. En estos casos es importante trabajar con ellos la sinceridad y el orden. La verdad es que como suelen ser niños responsables podemos caer en la tentación de dejar de lado el tutelarles y enseñarles a organizarse. 

Como ya hemos dicho antes, estos niños tienen un don y es nuestra obligación ayudarles a llevarlo a su máximo potencial. Su felicidad depende de ello! 

Primeros indicios...


   Comienzo de curso y vuelta a la rutina... Aunque con estos niños no existe tal cosa! Voy a contar cómo empezó todo esto en nuestra casa. No había antecedentes de alta capacidad detectada en la familia y no nos lo esperábamos. Pero cierto es que Alicia es una niña que desde muy pequeña ha preguntado todo, se empezó a expresar de manera elaborada muy pronto, tiene una grandísima creatividad e imaginación y tenía algún que otro problema de socialización. Le encantaba estar con los niños que son o bien más pequeños que ella o con los mayores. Pero conforme fue creciendo pudimos apreciar que con los de su edad se aburría, siempre había problemas: nunca juegan a lo que a mí me gusta”, “todos quieren jugar a lo mismo menos yo, porque es un rollo, etc... Hasta ahí pensábamos que podía ser una niña caprichosa y negativa y que sería cuestión de ponerse más serios en su educación. 
  Cuando cumplió los 8 años y medio aproximadamente, empezó de repente y sin motivo aparente, a estar muy mimosa, a solicitarme a mí, su madre, directamente más mimos y atención palabras de la propia niña. Seguidamente desarrolló tics y empezó a presentar problemas de insomnio. Esto nos preocupó muchísimo y desde luego comprendimos que ese “algo” que le estuviera pasando había que detectarlo y pararlo de inmediato, porque ya no era una cuestión de ponerse duros con su educación. Había algo superior a ella, que no controlaba y que le estaba haciendo sufrir.

   Lo primero que hicimos fue consultarlo con su tutora que confirmó que sí que habían apreciado una extrema sensibilidad en ella y que había que decirle las cosas con delicadeza para que no le impactaran demasiadoLlama la atención que es una niña que en el colegio está contenta, sonríe, se esfuerza  y participa en todo. Que es muy expresiva y muestra interés en el aula, se presenta voluntaria... Es cierto que a final de curso se le observaron los tics pero apenas y solamente durante alguna clase. Sin embargo, es un rol que desempeña en clase para tratar de encajar. Luego cuando llega a casa está tristona y aburrida, pesimista y desanimada. Odia el cole y no quiere ir.
   Estaba claro que necesitaba ayuda y recordando la evaluación que le habían hecho a los tres años, pensamos que era el primer camino que debíamos explorar para ver qué le podía estar pasando. Un día me preguntó que por qué el cielo era de color azul. Le traté de dar una explicación de que si los gases, la atmósfera etc. y más o menos le  convenció. Pero al día siguiente volvió a preguntarme “mamá, me lo has explicado pero no el por qué es azul el color y no verde o rojo?” Estaba claro que ella necesitaba otro tipo de explicación, más completa y detallada de lo que yo había podido darle.
   Otra otra pregunta al salir del cole también nos puso alerta. Iba tristona y con la mirada baja y le estuve preguntando por cómo había sido su día, qué habían hecho… Y me dijo que habían aprendido el aparato respiratorio. Estas cosas solían apasionarle anteriormente y le dije: “¡Qué bien, cariño! Esto te gusta mucho, no? y me respondió: “no mamá, ¿para qué me sirve saber que tenemos pulmones y lo demás si no me explican cómo funcionan?” 

     Así que una relación de preguntas de este tipo y el recuerdo de esa evaluación de los tres años nos llevaron de cabeza al gabinete donde le han evaluado. Efectivamente, tras varias pruebas que le chiflaron, y sobretodo porque se perdió cole… salió que tenía unas muy altas capacidades. Nuestra hija se aburría soberanamente en el colegio y no quería ir. Celebraba cada fin de semana como si se tratase de fin de curso. Decía que todos los niños de su clase le trataban mal y que nadie quería ser su amigo. Obviamente esto lo investigamos a fondo y no era verdad. Ella no estaba viviendo la realidad y todo lo personalizaba en exceso. Cuando alguien decía que otra persona era genial, ella automáticamente deducía que como a ella no se lo habían dicho, que todos pensaban que ella era horrible. Tenía la autoestima por los suelos. 

    Gracias a Dios que se detectó pronto y pudimos ponerle solución. Comenzó a ir a una terapia semanal en la que le ayudaron a controlar ese estrés, a conocer y gestionar sus emociones y a manejar su frustración. Hicieron con ella y con nosotros varios ejercicios para tratar de ver el lado positivo de las cosas y para que saliera de esa negatividad en la que se había metido. 

    Un curso después es otra niña. Más alegre y con más herramientas puesto que se conoce más a sí misma. La idea de contar esto es que pueda ayudar a familias que se encuentran con esta historia por primera vez. Que se animen a buscar ayuda especializada, que los niños son esponjas y por muy mal y bajo que lo veas, cambian rápidamente con ayuda específica. Tenemos que tratar de sacar lo mejor de cada uno, porque tienen mucho que dar y es nuestro deber ayudarles a disfrutarlo!

Comencemos por el principio...

La historia tiene una protagonista, Alicia, nuestra hija mayor. ¿Cómo se nos ocurrió llevarle a evaluar su capacidad? ¿Qué lleva a unos padres a plantearse que su hija pueda estar por encima de la media? Pues en nuestro caso, una madre muy cabezona, jeje  ;-)  Al ser primerizos y como es lógico, estar que se nos caía la baba con cualquier cosita que hiciera la peque, mi marido pensaba que eran "locuras de madre" ...


Pero yo estaba convencida que el resto de niños no era como ella. Resulta que cuando era pequeña, unos tres años, nos llamó la atención cómo se expresaba y el vocabulario que utilizaba. También tenía una gran memoria y situaba las cosas en el tiempo, era capaz de hablar perfectamente y con todo detalle de algo que había sucedido seis meses atrás y sólo tenía tres años. 


Como su padre en el fondo también veía de lo que era capaz la enana, al final le llevamos. Le evaluamos a través de una amiga especializada en Altas Capacidades. Y menos mal que contábamos con ella, que es una grandísima experta en el tema, porque si te metes en la red te encuentras de todo... Y si no sabes de qué va la cosa es muy fácil que te convenzan con teorías de todo menos científicas.


La niña se divirtió mucho con la experiencia. Comenzando por el viaje en metro al gabinete donde le pasaron las pruebas. No quitaba la vista de la ventana y me decía (tres años) "mamá, fíjate a dónde va toda esa gente con tanta prisa!"



“Jugó” con todas las pruebas salvo dos que se negó a hacer. Se negó porque sabía que no iba a ser capaz y su tolerancia a la frustración era muy baja. Recuerdo que una de las pruebas era botar una pelota. Claro, con tres añitos ella se veía incapaz de hacerlo, así que se negó. Aun así dio un CI bastante elevado y presumiblemente, si hubiera hecho las otras pruebas podría haber dado más alto según nos dijeron.

Para nosotros, ese CI era únicamente un número, un dato más. No nos decía nada nuevo sobre nuestra hija y dejamos así la situación, sin darle más importancia. De hecho, como la niña era feliz y la madre ya estaba contenta de que le habían dicho que efectivamente lo que ella detectaba era cierto, pues ya está, así quedó la cosa.


Con el tiempo esta madre, uséase una servidora, se hizo profesora. Se ve que esa intuición estaba allí porque siempre me han preocupado los alumnos que parecen diferentes a lo que entendemos como "la media". Dicho sea de paso, una "media" que no existe porque cada alumno es especial. Hay que tratar de llegar a cada uno de ellos, con lo que necesiten en cada caso particular.

Durante estos últimos años me he formado en atención a los alumnos con las más comunes NEE (Necesidades Educativas Especiales) como el TDAH, la dislexia y más últimamente los AACC. Me quedan muchas casuísticas especiales. Por ejemplo me llama mucho la atención todo lo relacionado con el espectro autista. Pero, sinceramente, creo que no se puede abarcar todo! aunque no será por falta de ganas... 

He decidido profundizar y tratar de especializarme en la atención a las Altas Capacidades. Creo que hay mucho alumnado con estas características que no está siendo detectado y eso es un problema. Primero para ellos, porque no están pudiendo educarse y desarrollar todo su potencial como deberían. Pero también para todos, para la sociedad, que deja que se "camuflen" y desaparezcan las personas con talento y ganas de aprender. 

Iré contando poco a poco mis pasos en la formación al respecto. Mis pequeños proyectos con los alumnos. Cómo vamos a tratar de atender a todos y cada uno según sus necesidades, capacidades y potencialidades. Así que, vamos a por ello! 

Veraneando con las altas capacidades...


   Aquí vengo a la carga de nuevo! tenía todas mis ilusiones de ser constante, de llevar el blog al día o semanalmente al menos y nada... me comió el curso. La verdad es que cuando estás inmerso en el día a día de las clases, la familia, la formación... no te da tiempo a nada. Todo son ilusiones y buenas intenciones. Pero oye, de ilusión también se vive, no?

   Y ya estamos en verano, vacaciones, más tiempo... ja! con peques en casa que levante la mano la que tenga "más tiempo". No sé cómo lo hacemos pero aunque no tengamos que ir a trabajar, los profesores siempre tenemos trabajo (bueno, el resto imagino que también...) Que si hay un cursito por aquí que tiene buena pinta, que si me quiero preparar esta asignatura, que si voy a ir pensando cómo voy a hacer el próximo curso... 

   Siguiendo con mi plan de formación, estoy metida de lleno en cómo actuar con las altas capacidades. Por un lado en el aula. Para ello el año pasado hice un curso online y asistí a varios congresos muy interesantes, así como a unas cuantas conferencias presenciales y virtuales. Ayer mismo estuve en una impartida por el prestigioso y reconocido experto en desarrollo del talento, D. Javier Tourón y salí con más ganas aún si cabe de que llegue noviembre. Empezaré entonces el Experto Universitario en Altas Capacidades que tiene organizado la UNIR. Confío en sacar el máximo provecho del mismo!!

   Además de prepararme para el aula, debo formarme para convivir en casa. Tengo dos pequeñas maravillas que cumplen con todos los estereotipos: cada una es totalmente diferente a la otra!!! Qué lucha cada verano... "Me aburro...", "no sé qué hacer...", "todo es un rollo..." y creedme que desde abril llevo planeando un verano lleno de planes, viajes y actividades... Pero jo! no me dejan descansar ni un ratito... No existe ese verbo en su vocabulario... 

   En fin, a ver si consigo reengancharme y retomo este diario de aprendizaje! 

           Feliz verano a todos!!!


Primer proyecto y fin del curso

   Quería contaros la reflexión final sobre el curso:

   Completísimo. Intensísimo. Interesantísimo. 

   Me ha costado un poco el ritmo vertiginoso que te obliga a llevar pero me quedo feliz con todo lo aprendido. Ahora sé cómo preparar los vídeos que quiero que mis alumnos vean en casa para preparar unas clases más interactivas. No sólo lo he podido poner en práctica sino que me llevo un montón de "trabajo para verano" de herramientas mencionadas en el curso que no he podido experimentar y con las que, por supuesto, voy a probar a realizar nuevos vídeos.

   De lo que más me ha gustado es que no sólo les "preparas" la lección para casa, sino que les puedes pedir feedback con preguntas insertadas en los vídeos, con trabajos y proyectos que les animas a hacer, etc... De verdad se está cambiando la forma de aprender. Ellos lo demandan y ahora me siento un poco más preparada para poder atender esa necesidad.

   Os cuento un poco de qué va mi proyecto... Es una pequeña introducción al álgebra y les pedía que creasen un "diccionario" que tradujera el lenguaje habitual al lenguaje algebraico. Esto es lo que más les cuesta luego a la hora de plantear problemas de ecuaciones de la vida real. El proyecto está explicado en la siguiente imagen:





   Para saber si estaba bien realizado o no los alumnos tenían que ajustarse a lo solicitado en la siguiente rúbrica. Por cierto, he aprendido qué son las rúbricas... Otra manera de evaluar, sabiendo los objetivos que te van a pedir desde el principio. Creo que les gustará, ahora, los profes tenemos que coger soltura al realizarlas... ;-) Os pongo la que hice para este proyecto a ver qué os parece...




Me estreno!!!!

 
   
   Recordáis el curso sobre Flipped Classroom que estoy haciendo? Pues conforme va avanzando, voy aprendiendo más de la metodología y de las herramientas a utilizar. Total, que para conocerlas de verdad hay que ponerlas en práctica... Así que aquí me tenéis, orgullosa de mi primer vídeo realizado, enriquecido con preguntas y publicado en YouTube. Me siento como... estrenando algo.

   Me da la sensación de que con el tiempo lograré hacerlo de forma más rápida y mecánica, también espero aprovechar todo el trabajo que voy haciendo de un curso para otro, pero buuufffff.... Qué de trabajo me ha costado!!! Por eso estoy tan contenta, a pesar de todos los fallos que le encuentro una vez publicado, jejeje

   Bueno, es el primero de muchos, ya iré mejorando!! Lo importante es no dejarlo, estoy ilusionada y tengo que aprovecharlo para buscar, enriquecer y crear más material para las clases. Los alumnos lo van a agradecer y les va a gustar más aprender así, estoy segura, puesto que es lo que están demandando constantemente!!

   Os dejo el enlace del vídeo enriquecido con preguntas dirigidas a los alumnos. El código de la clase es: endesia. A ver si conseguís verlo y así voy aprendiendo cómo pedírselo a los alumnos porque hacerlos y que ellos no puedan acceder al material es una tontería...


   Por si no conseguís verlo bien, os dejo también el enlace del vídeo sin las preguntas, a ver qué os parece. Espero vuestras opiniones!!!

Mejorar sin tecnología necesariamente?



   Cuanto más me sumerjo en el mundo de la innovación educativa más descubro nuevas herramientas para todo lo que se te ocurra hacer en clase. Si quieres compartir información, ponerla en un mural precioso o infografía, hacer un test, vídeo con preguntas, grabar un podcast... Todo existe. Y para todo hay unas cuantas aplicaciones o herramientas que te ayudan. 

   Hasta aquí entiendo que la tecnología es nuestra aliada y la verdad es que ayuda un montón. Sobre todo porque existe una gran comunidad de docentes que, gracias a las redes, podemos estar conectados y continuamente aprendiendo unos de otros.

    Pero...

   Pero. Creo que hay un problema con esta tendencia de apoyarnos tanto en la tecnología. Nos encontramos a menudo que los alumnos no siempre tienen acceso a internet, o no saben navegar bien, o sus padres (con muy buen criterio) les tienen restringido el uso de las pantallas entre semana. Y claro, si todo lo que tienen que hacer en casa se centra en su trabajo frente a un ordenador, móvil o tablet y la verdad es que no pueden hacerlo, ya está, ya tenemos excusa para "desconectarnos" real y figurativamente.

   Me pregunto si podemos mejorar la educación ayudándonos de la tecnología sí, pero no dependiendo tanto de ella...? La verdad es que creo que innovar no es desechar todo lo que se ha venido haciendo hasta la fecha sino combinarlo con nuevas propuestas. El problema lo veo cuando solamente nos apoyamos en estas últimas... Me gustaría encontrar la manera de darle la vuelta a la clase, trabajar mediante proyectos, hacerlo de forma cooperativa y no tener que convertirme en un experto en el manejo del ordenador... Quizá con más práctica!

Flipped Classroom


   Nuevas metodologías... Hay quince mil, y como te pongas a enredar, te encuentras otras tantas... Pero la que tengo claro que va a revolucionar todo es el Flipped Classroom. Mola para empezar el nombre :-) pero es que en cuanto te pones a investigar un poco, te asombras de todo lo que se puede conseguir aplicándola.

   Como he visto que hay mucha, mucha, pero mucha información, he decidido coger el toro por los cuernos y hacer un curso serio sobre el FC. Y me planteo lo siguiente: 

1.¿Qué idea tenía yo de FC antes de hacer el curso? pues eso, que parece que está de moda y que se trata de darle la vuelta a la clase según la idea tradicional que tenemos de aula.  
2.¿Ahora? me reafirmo en la idea previa que tenía, y me ilusiono con las nuevas herramientas que debo aprender para poder aplicar el FC de verdad en mis clases.
3.¿Qué me ha sorprendido o tengo ganas de probar en mi aula? Todo. Creo que clase en la que no se aplique es clase perdida. Se nota que los alumnos no te siguen y pierden el interés. Todos los días me piden: "¿Podemos hoy hacer algo divertido?" y simplemente si enciendes el ordenador o les dices, hoy toca un juego, ellos felices. Ya tienes su atención. Es como si abrieran las puertas y te invitasen a entrar, carta blanca!

   A ver qué os parece lo siguiente....



Comienza la aventura...



   Por una cosa o por otra, al final he comenzado este viaje... Confío en que poco a poco se irá llenando de experiencias. Mías propias también, pero sobre todo, de esa cantidad de gente buena interesada en mejorar la educación, la forma de aprender y de llegar a todos y cada uno de nuestros alumnos.

                                                ¡BIENVENIDOS!

EducaPassion

¿Por qué este nombre? y ¿por qué ahora?                             27 noviembre 2019    Mi relación con la docencia es ...